| T O P I C R E V I E W |
| felix |
Posted - 15/10/2008 : 22:35:56
La Xunta reclamará la gestión del Miño-Sil para vetar nuevas centrales
Touriño asegura que no se construirán más instalaciones hidráulicas en la comunidad
El ministerio está de acuerdo en ceder los ríos a Galicia como ha hecho en Andalucía con el Guadalquivir
fuente: la voz
El presidente de la Xunta de Galicia, Emilio Pérez Touriño, anunció ayer que la Administración autonómica se opone rotundamente a la tramitación de nuevas instalaciones hidráulicas en los ríos gallegos, porque ya hay «un nivel de explotación suficiente nas concas». El jefe del Ejecutivo autonómico afirmó que «bajo ningún concepto» se permitirán más explotaciones de este tipo: «Os nosos informes serán sempre negativos e, por certo, vinculantes, en relación con calquera solicitud que se está plantexando e tramitando na sede do Goberno de España».
La intervención de Touriño se produce al día siguiente de que el Ministerio de Medio Ambiente hiciera pública la existencia de una docena de proyectos en tramitación para la instalación de nuevas centrales en los dos grandes ríos de Galicia.
Además, Touriño anunció que el Ejecutivo gallego pretende tener un control pleno sobre todos los ríos de la comunidad, y para ello solicitará de inmediato al Gobierno central la encomienda de gestión de la cuenca Miño-Sil. Esta fórmula, que el Consejo de Ministros podría decidir mediante la firma de un decreto, supondría que las competencias continuarían en manos estatales, y el Ministerio de Medio Ambiente tendría la última palabra sobre la planificación de la cuenca, pero la gestión pasaría a manos gallegas.
En esta gestión se incluiría la capacidad para elaborar los informes de impacto ambiental, la principal herramienta de una Administración pública para frenar la tramitación de una nueva central hidráulica.
La encomienda de gestión fue la solución que se sacó de la manga el Gobierno de Zapatero para concederle la titularidad del Guadalquivir a Andalucía sin incumplir la Constitución y ver cómo los tribunales le acababan dando la razón a Extremadura, comunidad por la que discurre parte de la cuenca. De hecho, el Gobierno de Manuel Chaves está a punto de concluir los trámites para poder gestionar el gran río andaluz.
Visto bueno de Espinosa
Fuentes conocedoras de las negociaciones aseguran que el ministerio que dirige Elena Espinosa está de acuerdo en dar este paso. La propia ministra ourensana adelantó en una entrevista a La Voz en junio pasado la disposición del Gobierno para traspasar la gestión de la Confederación Hidrográfica.
El presidente de la Xunta justificó la petición en la necesidad de unificar criterios de gestión de todos los ríos gallegos. Actualmente, la Administración autonómica ya gestiona la cuenca Galicia Costa, en la que fundamentalmente hay pequeños aprovechamientos hidráulicos. La Xunta ya ha anunciado que no se construirán más. Pero el Miño-Sil, por su condición intercomunitaria (el afluente nace en León), está en manos de la Administración central.
Touriño efectuó este anuncio durante la visita que realizó a las obras de construcción de la primera depuradora de aguas residuales de Baiona, a muy pocos kilómetros de la parroquia de Burgueira, en Oia, precisamente donde un vertido de lodos desde el embalse de una minicentral eléctrica arrasó las pozas naturales de la localidad, ocasionando una catástrofe sin precedentes.
Además, el presidente de la Xunta afirmó que el Gobierno gallego tiene los elementos de protección necesarios para blindar los ríos de la comunidad frente a la tramitación de nuevas instalaciones hidráulicas.
Así, recordó que en diciembre del año pasado el Consello de la Xunta autorizó el Plan Director de la Red Natura, con el compromiso de ampliarlo hasta el 2010, y el pasado mes de mayo se dio el visto bueno al inicio de la declaración de paisaje protegido del cañón del Sil.
El presidente del Gobierno gallego afirmó en este sentido que existe una política definida de conservación y preservación de los recursos y que el nivel de explotación hidroeléctrico ya es suficiente. «E polo tanto, a partir de aí, a nosa posición será negativa e preservadora», concluyó.
La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil fue creada hace unos meses y tiene sede en Ourense, aunque su titularidad es estatal. Su función es desarrollar la gestión hidráulica de cerca de 20.000 kilómetros cuadrados repartidos en seis provincias: Ourense, Lugo, Pontevedra, León, Zamora y Asturias.
La Xunta argumenta para reclamar la encomienda de gestión que la mayor parte ?sobre un 90%? de la cuenca discurre por territorio gallego.
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